Coimbra, 30 de septiembre 2024.- El pasado día 26, el profesor portugués Boaventura de Sousa Santos ha presentado a través de sus abogados, João Correia y Afonso Pedrosa, una demanda civil de protección de la personalidad, ante el Tribunal Judicial de Coimbra (Portugal).
Esta acción se interpone como vía para que desde el sistema judicial se asegure la protección de su buen nombre y de su honor, dadas las acusaciones formuladas por las firmantes de la denominada como 6ª carta de colectivo, el pasado mes de marzo.
Los abogados del profesor Boaventura afirman en la demanda que “La abundante documentación, que incluye todos los correos electrónicos intercambiados con los demandados, demuestra que en ningún momento el profesor Boaventura les acosó o les secuestró profesionalmente.. Al contrario, siempre contaron con la comprensión y el firme apoyo del Profesor para seguir las más variadas opciones profesionales y académicas. Los documentos que existen están en insalvable contradicción con lo que aparece en la 6ª carta del autodenominado colectivo de víctimas y con lo aparecido en la agencia pública."
La acción de 26 de septiembre es consecuencia de la campaña difamatoria de la que se han hecho eco los medios de comunicación desde abril de 2023, cuando Routledge publicó un libro que contenía un capítulo difamatorio contra el profesor Boaventura, varios de sus colegas y el CES (Centro de Estudios Sociales de la Universidad de Coimbra). Entretanto, el editor ha retirado el capítulo del libro, dado su carácter difamatorio y no científico.
Desde el primer momento, el profesor Boaventura ha puesto todo su interés en el esclarecimiento de los hechos, prueba de ello fue su colaboración plena con la Comisión Independiente creada por el CES y que dio como resultado un informe en el que no se formulaba acusación alguna contra Profesor Boaventura.
Sin embargo, ni con motivo de su declaración ante dicha Comisión, ni con posterioridad ante solicitudes de sus abogados a la Dirección del CES, ha sido informado de los hechos ni de las acusaciones concretas que se le atribuyen, algo del todo contrario al debido proceso. Esto ha sido una constante durante todo este tiempo y ha provocó que el Profesor Boaventura emprendiese acciones legales contra el CES para tener acceso a los documentos y así poder defenderse y, paralelamente, solicitase al Ministerio Fiscal que le constituya como imputado para poder demostrar su inocencia ante un órgano judicial.Proceso inquisitorial por parte del CES
A pesar de que el informe presentado por la Comisión Independiente creada por el CES, el 13 de marzo de 2024, no formulaba acusación alguna contra el profesor Boaventura Santos, se hizo pública, apenas una semana después, una carta con graves ataques, inexactitudes y nuevamente difamatoria sobre él. Dicha carta fue firmada por trece personas, cuatro de ellas investigadoras del CES.
Además, el 23 de mayo de 2024, se publicó una entrevista en la Agencia Pública (site privado), en la que 7 de los 13 firmantes de la carta acusaban a Boaventura de hechos muy graves. A raíz de esta carta, la dirección del CES abrió un proceso de investigación en el que el Profesor
Boaventura resulta aludido. En varias ocasiones sus abogados han solicitado de manera verbal y por escrito los datos de las acusaciones que se han realizado sobre su representado para poder, así, ejercer su derecho a la defensa. Sin embargo, los abogados del CES se han negado siempre a facilitar tales datos por escrito.
Tras una de las reuniones, el pasado 29 de agosto, se levantó un acta firmada por todos los presentes en la que figura la posición de los abogados del Profesor: "se ha solicitado al profesor Boaventura de Sousa Santos que se pronuncie sobre las acusaciones formuladas contra él por personas cuya identidad desconoce y de cuyo contenido tiene mucho menos conocimiento, y pedimos que identifiquen a las personas que han denunciado delitos de cualquier tipo contra el profesor y que describan los hechos ilícitos que se le atribuyen”. Los días 9 y 13 de septiembre los abogados Correia y Pedrosa solicitaron de nuevo y por escrito esta información, pero la respuesta fue nuevamente negativa.
Esta carta y la entrevista a la “Agência Pública” son las que dan lugar a la acción civil de protección de honor presentada por el Profesor Boaventura. Afirma el profesor Boaventura: “Tras más de un año y medio de injustos ataques sistemáticos y guerra mediática contra mi, apoyada por los órganos directivos de la institución que creé hace 45 años y que está decidida a utilizarme como “chivo expiatorio”, se me impidió defender eficazmente, como exige una sociedad democrática regida por el Estado de Derecho y la presunción de inocencia. Como resultado de este comportamiento, por dignidad, coherencia y honestidad intelectual, se me ha obligado a emprender acciones legales. Infelizmente, el comportamiento del CES que, con el objetivo de apartarme definitivamente de la institución que creé y que me impidió defenderme eficazmente y presentar mi versión y mis pruebas, no me dejó otra alternativa que emprender acciones legales contra las 13 mujeres que firmaron la 6ª carta. La primera acción, contra las subscritoras de la carta que viven en Portugal, ya se ha presentado y la acción contra las que no viven en Portugal se presentará en los próximos días.
Es en los tribunales, y no en los medios de comunicación, donde espero escuchar ahora la versión de los firmantes de la carta (a pesar de esperar un nuevo ataque en los medios). Como siento un gran respeto por todos los investigadores del mundo que viven en una situación precaria, contra la que siempre he protestado, y como repudio con vehemencia cualquier forma de acoso, la acción que he interpuesto contra cuatro de los firmantes (las firmantes portuguesas) no es una acción por daños y perjuicios. Sólo quiero demostrar que las acusaciones son falsas. No estoy dispuesto a aceptar ni tolerar que esta campaña de desprestigio continúe. El CES y las firmantes de la carta no me han dado otra opción que emprender acciones legales para defender mi nombre y restablecer la verdad...”.
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